Visitamos el restaurante Divertimento Chileno, que se encuentra en los pies del Cerro San Cristóbal, más de 30 años de historia tiene este lugar en donde se encuentra la comida clásica chilena y su «rincón italiano».

Buscando sobre sus inicios, encontré la historia que cuentan en su sitio web, en donde Bruno Sacco, vicepresidente de ACHIGA en esa época, realizó un concurso de recetas chilenas a nivel nacional para mantener la tradición chilena y salieron tantas buenas recetas que armó el Divertimento Chileno en 1991.

Ya con esa introducción, era lógico que teníamos que probar algún clásico como el pastel de choclo o las sopaipillas con pebre. Y así fue como probamos los 3 tipos de cabernet sauvignon de Kaune para ir reconociendo estilo calza con qué plato.

Sopaipillas con un «pebre» de cochayuyo

Piedras de AuqueHacienda CaoneReserva Directorio
Hace que la comida se acidifique, no se recomiendaFunciona muy bien, equilibra perfecto los sabores, hasta genera una limpieza en la boca.Al primer sorbo, genera dulzor pero luego se acidifica la comida. No está mal.

Salmón Chancaca:

Piedras de AuqueHacienda CaoneReserva Directorio
Genera una astringencia final, pero no está mal. Es el más recomendadoAcidifica el plato, en vez de mantenerlo con el dulzor que corresponde. No se recomiendaEndulza el plato y lo lleva a otro sabor. No está mal, pero no resalta el sabor del salmón.

Fettuccine bolognesa con osobuco:

Piedras de AuqueHacienda CaoneReserva Directorio
Se complementa bien, no hay cambios de sabor en el plato, lo endulza un pocoGenera un picor interesante en boca, resalta el sabor de la carne. No molesta.Endulza el plato, pero no molesta.

Pastel de Choclo:

Piedras de AuqueHacienda CaoneReserva Directorio
Funciona después de unos minutos, porque al principio existen sabores extraños, y luego aparece un dulzor.Aumenta el picor del pastel, pero luego lo acidifica y es molesto.Amarga el pastel, no recomendable.

Así que ya sabes, si vas a pedir alguno de estos platos, revisa que botella de vino Kaune pedir. Y también aprovecha de revisar bien la carta de este restaurante, porque aprovechando que es uno de los que está en el Cerro San Cristóbal, puedes relajarte viendo los arboles, estar en la terraza, y desconectarte unos minutos de la ciudad ¿y por qué no? subir al teleférico y recorrer el cerro.

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