Hace años atrás (5 o 6 años) recuerdo que estaba conversando con mis compañeras de trabajo en un almuerzo de esos de 4 lucas sobre los restaurantes y bares más «cuicos» de la ciudad, creo que empezamos a hablar del Boragó solo porque estábamos comiendo unos tallarines medio pegados, con una salsa blanca malísima y jamón duro. Seguíamos con las «tallas» de: «por lo menos estamos comiendo más que en el boragó» o «no podría pagar más de 20 lucas por un plato sabroso» y terminando con un «me faltan 3 vidas para ir a un restaurant así». Ah… y obvio que los comentarios eran «pero terrible de iguols Rodolfo Guzmán», y todas estábamos de acuerdo.

Obviamente, antes de estas conversaciones, fui una de las que en twitter tiraba tallas de los platos del lugar y que pagabas por ir a comer aire. Es que una cae en esos juegos porque antiguamente twitter era un grupo de escolares tirando tallas entretenidas y podías reírte todo el día de un tema. ¡Y NO DIGAN QUE NO LO HAN HECHO! Porque estoy segura que tiraron alguna talla al respecto. De todas maneras les dejo un link del 2016: https://www.biobiochile.cl/noticias/espectaculos-y-tv/notas-espectaculos-tv/2016/11/27/twitteros-festinan-con-los-platos-del-borago-el-restaurante-mas-prestigioso-de-santiago.shtml

Pero ahora que ya llevo más de un año conociendo restaurantes y bares todos los días, y tengo una capacitación en sabores, aromas, términos gastronómicos y tanta cosa, que era un hito importante poder visitar este restaurant. Igualmente ya había conocido algunas «cocinas de vanguardia» o muchos chefs o sommelier que habían trabajado en el Boragó que para mi ya era necesario ir a investigar qué tan real era su puesto 29 en el The World 50 Best Restaurant.

Alejandro ya me había contado su experiencia el año pasado cuando fue con un grupo y en una palabra me dijo «te acuerdas de la película -el menú-, pues es similar por los «si chef» o ver lo minimalista del lugar». Y eso igual me generaba ganas de poder ir a conocer el espacio y los sabores de Chile.

Para este año 2024 empecé con una lista de los lugares que debo ir si o si, como la Viña Vik, Fuegos de Apalta, Las Majadas de Pirque y obviamente Boragó.

Tuve suerte, me invitaron y no pude rechazar la invitación y lo bueno era conocer el menú de verano con el conocimiento que ya tengo en el área gastronómica. Así que ahora les voy a contar como me fue (perdón por la extensión de la introducción, pero era importante contarles).

Esto fue lo que describí rápidamente:

Es un espacio grande, con varias mesas, todo impecablemente bien definido para que moverse entre los que están en el servicio sea perfecto y sin choques.

Todos están observando sin que te des cuenta si terminaste el plato, si se te cayó algo, si el agua del vaso o vino de la copa ya está medio vacío para poder rellenarlo, etc. Se preocupan de que hayas dejado el tenedor para pedir el siguiente plato, o te preguntan si está todo bien o si necesitas algo.

Los chefs en la cocina están todos trabajando, casi con pinzas, al tener los platos listos van a la mesa y los explican con una rapidez implacable, yo trataba de preguntar ciertas cosas para entenderlas mejor, pero también son como 10 tiempos así que no daba para conversar de la vida.

Como estaba tan concentrada de saber bien lo que estaba probando, a veces lograba escuchar el «si chef!» que me había comentado Alejandro y observaba las mesas de ocupadas y como iban avanzando.

Pregunté si podía sacar fotos, porque sé que puedes hacer videos, pero me habían comentado que el flash está prohibido, así que al sacar la cámara traté de hacerlo bien piola. No estuvo tan fácil sacar fotos porque estaba oscuro pero tengo algunas que subiré al final del post.

En un momento comenté que era crítica gastronómica y me respondieron «ya sabemos y también sabemos que eres amiga de Daniel Greve«, así no puedo pasar piola en ninguna parte…

Las mezclas son impresionantes, todos los sabores que alcanzas a reconocer llegan a recordar cosas que has probado en tu vida si es que no has sido mañoso.

Mucho extranjero en el lugar, feliz probando sabores chilenos y viendo las presentaciones de cada tiempo. Las indicaciones las dan en español o inglés, porque te explican los pasos para comer bien lo que te llevan para sentir mejor los sabores.

Ya llegaba el final de los platos con unos merengues mentolados helados y quedaban pocas personas, tenían ordenados los muebles con los platos, los chefs ya se habían movido y el servicio en mesa era el que quedaba para hacer el cierre. Sólo quedaba mi mesa y les agradecí el servicio, aproveché de sacar unas pocas fotos de los chefs (no me atreví antes) y la verdad es que todos andan bien contentos, motivados, les gusta lo que hacen y se nota. Les agradecí a la mayoría lo que hacen y así también entendí que corresponde completamente el puesto en los 50best y ojalá todos puedan conocer ese impecable servicio.

Al irme, hasta me regalaron un tomate que estaba en la recepción, ¿qué mejor?

Escribí algo más formalito en www.800.cl y lo pueden ver desde acá por si lo quieren leer: https://www.800.cl/?id=1357&idNota=15151

Y ahora algunas fotos bonis que logré hacer:

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